Hoy día 19 se celebra San José y el día del padre. Día de llamadas, de felicitaciones, de pequeñas sorpresas para los padres…, un día especial y alegre. Pero este año para mi es un día extraño, un día en que los recuerdos se agolpan, un día de añoranza, es el primer año que no puedo felicitar al mío.
Recuerdo de pequeña que en el colegio, en la clase de manualidades, preparábamos un regalo para sorprender a nuestros padres y nos hacían escribirle una pequeña redacción. Siempre se encabezaba con Querido papa…
Otro de los recuerdos de infancia es el olor a leche aromatizada con limón y canela con el que se impregnaba mi casa, mi madre siempre preparaba la crema catalana, para un día como hoy, para celebrar el santo de mi padre y de mi abuelo, los dos se llamaban José y siempre venían mis abuelos a casa para celebrarlo.
Pero durante un tiempo mi madre dejó de prepararla, decía que se le hacía pesado estar removiendo lentamente delante de los fogones para que espesara la crema. Así que hace unos años tome el relevo y empecé yo a prepararla.
Siempre he preparado la tradicional, pero este año, si mi padre todavía estuviera con nosotros, hubiera tenido que hacerle algo muy suave y ligero y esta cumple todo los requisitos, lástima que no la preparé antes, cómo le hubiera gustado, seguro que hubiera repetido.
Ingredientes
para 4 personas
400ml de nata 35%MG
1 rama de canela
la piel de 1/2 limón
4 yemas de huevo
50 gr de azúcar
2 cargas de sifón
2 cargas de sifón
Preparación
En un cazo ponemos la nata junto con el palo de canela y la piel de 1/2 limón, sólo la parte amarilla, sin nada de blanco, y llevamos a ebullición, cuando arranque a hervir retiramos inmediatamente del fuego y dejamos templar. Retiramos el palo de la canela y la piel del limón.
Mientras en un bol mezclamos las yemas de huevo junto con el azúcar hasta obtener una mezcla blanquecina y espumosa.
Vertemos un poco de nata en la mezcla de huevos, poca cantidad para evitar que cuajen los huevos con el calor de la nata y removemos bien, vamos agregando poco a poco y sin dejar de remover hasta que este todo integrado.
Ponemos la crema resultante al fuego suave y sin dejar de remover vamos cociendo la crema, tan pronto espese y sin que llegue a hervir, retiramos del fuego.
Colamos la crema, la enfriamos un poco con la ayuda de unas varillas y vertemos en el sifón. Cargamos con 2 cargas de sifón y dejamos en el frigorífico. Mejor toda la noche.
Antes de servir agitamos el sifón y servimos.
Nota: Si no tenéis sifón, dejar la crema en un bol y al día siguiente con unas varillas eléctricas montáis la crema, os montará perfectamente, no montar demasiado firme sólo hasta que esté cremosa.
Podéis adornarla con azúcar quemado. Esta vez en casa hemos espolvoreado cacao y servido con unos bizcochos de soletilla, tiernos y suaves.
La receta es de Salseando en la cocina.
¡Impresionante! Sencillamente esta espuma debe dejar boquiabierto a cualquiera que la prueba.
Muchos besos
Molts petons per tu avui (i dema, i passat, i l´altre…). Gaudeix dels records, això sempre queda al cor.
Quina entrada més bonica Neus! I és que als pares els trobem a faltar i de quina manera! Ens hem fet grans, però els records ens venen a flor de pell en aquestes ocasions…El teu pare hauria estat feliç i orgullós de tenir una filla com tu, que a més de ser encantadora, cuina com els àngels! Aquesta recepta és una delícia! Un petonet wapi i avui una abraçada ben, ben forta!
Espectacular crema!! Que bonita entrada llena de recuerdos y sentimientos, debemos valorar más las cosas para cuando dejamos de tenerlas, aún así, hay que dar gracias por todos esos recuerdos y todos los momentos vividos. Besos guapa!
Ana
Estic segura que al teu pare aquesta crema li hagués encantat, el gust de tota la vida però aun na suavitat exxtrema.
Gaudeix dels bons records guapi
Un munt de petonets
La crema es impresionante y la entrada que has hecho hoy preciosa! Con el aspecto que tiene estoy segura que a tu padre le encantaría.
Un besito
Una espuma impresionante y lo mejor, pensando en él mientras la preparabas, con mucho cariño :o)
Besos,
Palmira
deliciosa
Confieso que soy una sacrílega y hago las cremas y natillas con thermomix. Sí, no es lo mismo, pero tampoco para mis brazos 🙂
Tu versión ligera y espumada, me parece genial.
Una copa con glamur, que estoy seguro que tu padre te hubiera dicho que a partir de ahora esta crema que mejor que la otra, mucho mas suave y aerea.
Recordar a los seres queridos es el mejor homenaje que les hacemos.
Petons
Le habrá sabido a gloria a tu papi, porque seguro que la ha probado y sentido con todo el cariño que se la has preparado
Bss
Brutal!!! Lástima que no tengo sifón, si no la probaba seguro!!! Besos.
Estas recetas que llevan un ingrediente exclusivo que es el cariño con el que se elabora, tienen un sabor sin igual. Imagino lo duro que debió hacerse el sentarte delante del ordenador a redactar esta entrada, con esos sentimientos tan recientes y ahora a flor de piel por los recuerdos que lleva esta receta. El, ya no estará aquí físicamente pero su recuerdo en tu memoria lo mantiene vivo.
Tu receta, es verla y leer la explicación como para hacerme a la idea de lo suave y agradecida que ha de ser al paladar, y en tu caso, al corazón.
Un fuerte beso.