El conejo me encanta de cualquier forma, a la brasa, al horno, con salsa, la encuentro muy sabrosa. Es cierto que  mucha gente por diversas causas no la comen. Pero realmente es una carne rica en proteínas y baja en grasas, además parte de su grasa se encuentra en la piel.
Esta receta la encontré en el blog de Beatriz, cuando la colgó en su blog paso rápidamente a mi lista de pendientes, ahora está en la lista de favoritas.

 

Conejo a la mostaza-cocinando-con-neus

 

Ingredientes
para 4 personas
8 espaldas de conejo o un conejo entero
3 tomates maduros
4 cebollas grandes
2 ajos pelados
un chorrito de vinagre
unas ramitas de tomillo
mostaza de Dijon
unos granos de pimienta
1 vaso de vino blanco
aceite de oliva virgen
sal gorda

Preparación

Precalentamos el horno a 180º.
Pelamos las cebollas y las cortamos a juliana, hemos de cubrir muy bien el fondo de la bandeja que vayamos a utilizar o cazuela en mi caso. (tiene que ser apta para horno).
En un mortero preparamos una picada con los granos de pimienta, los dos ajos, una cucharada de aceite de oliva virgen, un chorrito de vinagre, una cucharada de mostaza de Dijon.
Tiraremos esta picada sobre la cebolla que tenemos extendida en la cazuela.
Embadurnamos el conejo por todos los lados con mostaza de Dijon y lo vamos depositando sobre la cebolla en la cazuela, repartimos los tomates, que le habremos practicado unos pequeños orificios con la ayuda de un cuchillo o tenedor, repartimos un chorrito de aceite de oliva por encima y condimentamos con sal.
Llevaremos al horno durante 45 minutos a 180º.
A media cocción vertemos 1 vaso de vino blanco y unas hojitas de tomillo fresco.
Terminaremos la cocción hasta que esté doradito.
Servir acompañado de una cama de cebolla y el tomate, regado con la salsa.