Hoy traigo un risotto con sabor a Islas Baleares, elaborado con sobrasada de Mallorca y  queso de Mahón de Menorca.
Dos productos con sellos que confirman su autenticidad y su calidad. El queso de Mahón de Menorca, tiene D.O.P Dominación de Origen Protegida. La sobrasada de Mallorca es un embutido que goza con el sello IGP Indicación Geográfica Protegida.
Os animo a probar este risotto, por qué os va encantar.

Risotto de sobrasada con queso de Mahón

Ingredientes
para 4 personas
350 gr de arroz arborio
1 cebolla pequeña
1 copa de vino blanco
1 cucharada de mantequilla
aceite de oliva virgen extra
1 litro de caldo Aneto
sal
pimienta
cebollino
Nota: si os gustan los sabores intensos, poner los 125 gr de sobrasada, si lo queréis más suave poner entre 90 gr o 100 gr.
Si no encontráis queso curado de Mahón, podéis sustituirlo por queso parmesano.

Preparación

Ponemos el caldo en un cazo y lo llevamos a ebullición, tenemos que mantenerlo siempre caliente para no parar la cocción del risotto una vez empecemos a incorporarlo a la cazuela.
Rallamos el queso y reservamos en un bol.
Guardamos unas lascas de queso para la decoración final.
Cortamos el cebollino finamente.
Pelamos la cebolla y la cortamos finamente, lo más pequeña que podamos.
En un bol ponemos la sobrasada troceada.
Preparamos la copa de vino blanco, que sea de buena calidad.
Pesamos el arroz y lo reservamos en un bol.
Con el risotto tenemos que tener todos los ingredientes preparados, por qué una vez iniciamos su elaboración, iremos añadiendo los ingredientes sin interrupciones.
En una cazuela baja ponemos una cucharada de aceite de oliva virgen extra junto con la cucharada de mantequilla, cuando la mantequilla este derretida, añadimos la cebolla picada. Pochamos a fuego lento.
Cuando este tierna y transparente añadimos la sobrasada, removemos bien para que se deshaga.
Incorporamos el arroz, removemos que el grano de arroz quede impregnado de grasa, tostamos durante un par de minutos.
Vertemos la copa de vino blanco y subimos el fuego para que se evapore el alcohol.
Bajamos el fuego y empezamos a verter el caldo en la cazuela. Primero un cazo y no incorporaremos el siguiente cazo de caldo, hasta que el arroz se haya bebido todo el caldo, sin dejar de remover en ningún momento.
Este proceso durará durante 18 minutos o 20 minutos, dependiendo de la dureza del grano.
Un par de minutos antes de terminar la cocción, al añadir el último cazo de caldo y lo tengamos todavía caldoso, añadiremos el queso rallado mezclaremos bien, el queso le dará la cremosidad necesaria al risotto. Retiramos y dejamos reposar 5 minutos el risotto.
Servimos inmediatamente con unas lascas de queso y cebollino espolvoreado.

 

Risotto de sobrasada con queso de Mahón