Suena el despertador, toca levantarse y salir del confort agradable que nos proporciona el edredón en los días fríos de invierno.
¿Qué haces tú nada más levantarte? ¿Te diriges a la cocina? ¿Quizás lo primero que haces es prepararte un buen café bien cargado y humeante para despejarte?, ¿Te gusta levantarte antes que el resto de la familia y disfrutar de tu café tranquilamente mientras el silencio reina todavía en la casa?. ¿O tu cocina ya es un auténtico hervidero a causa de las prisas matinales?.


Ya desde pequeña que relaciono el café con ponernos en marcha por la mañana a por un nuevo día. Y es que mi madre lo primero que hacía al levantarse era preparar la cafetera, la de toda la vida la Oroley. Yo desde mi cama podía oír como trasteaba en la cocina, mientras preparaba el desayuno para mi hermana y para mi y los pequeños silbidos de la cafetera mientras iba saliendo el café lentamente y el aroma iba invadiendo toda la casa, era el momento de levantarse. 

Y esta misma costumbre la tengo yo desde que me independice, y de eso hace muchos años, nada más levantarme me voy directa a la cocina a prepararme mi primera taza de café.



Ahora con las cafeteras de cápsulas es mucho más fácil disfrutar de un buen café de una forma rápida y sencilla.


Presionas el botón de encendido, introduces la cápsula de café que hayas seleccionado, aprietas el botón y el café empieza a salir lentamente, desprendiendo ese agradable e inconfundible aroma.

En casa desde hace unos días, gracias a Dolce Gusto, tenemos la nueva cafetera Eclipse, además de una gran variedad de cápsulas para todos los momentos del día y gustos. Sin duda alguna un buen regalo anticipado de Navidad. 


Las cafeteras Dolce Gusto son de fácil uso, dispone de tecnología táctil, nos permite elegir la cantidad de agua para la bebida seleccionada solo deslizando el dedo por la superficie. Además cada cápsula nos indica el tamaño ideal para esa bebida, ni siquiera tenemos que preocuparnos de la leche, ya que las variedades café con leche y cortado llevan la leche incorporada, las variedades capuccino y  latte macchiato incorporan una cápsula de leche aparte para preparar nuestra bebida.

La cafetera de Dolce Gusto tiene hasta 15 bares de presión para preparar el café perfecto y es la única cafetera que nos ofrece la posibilidad de preparar bebidas calientes y frías. Dispone de una gran variedad de cafés, chocolates y tés.

Entra en Dolce Gusto y descubres sus cafeteras y la gran variedad de bebidas que tiene.

Pero con el café también podemos preparar una infinidad de postres para los amantes de esta agradable bebida.Te propongo estos canutillos de hojaldre rellenos de crema pastelera al café. La receta de la crema  es de Dolorss.

Canutillos de hojaldre rellenos de crema de café

Ingredientes
para la crema
2 cápsulas de café Dolce Gusto Lungo (175 ml de café)

250 ml de leche o bebida de soja

100 gr de azúcar
1 huevo
2 yemas de huevo
40 gr de maicena
para los canutillos
2 láminas de hojaldre
1 huevo batido
azúcar glas para espolvorear


Preparación

Preparamos el café Dolce Gusto Lungo.En un bol ponemos todos los ingredientes y batimos con la ayuda de una batidora eléctrica para que quede todo bien integrado.

Vertemos en un cazo y llevamos a ebullición a fuego medio, sin dejar de remover para que no se hagan grumos, cuando rompa a hervir dejamos cocer durante un par o tres minutos hasta que espese.

Humedecemos el interior de una manga pastelera y vertemos la crema en el interior, una vez fria guardamos en el frigorífico para que tome consistencia. Mejor toda la noche.

Precalentamos el horno a 200º.
Forramos una bandeja apta para horno con papel de hornear.

Extendemos la lámina de hojaldre sobre una superficie de trabajo.Con una regla (sólo de uso para la cocina) y la ayuda de un cuchillo afilado vamos marcando pequeñas incisiones en  la lámina en la parte inferior y en la parte superior, dejando 2 cm entre si, luego vamos a buscar los dos puntos y cortamos las tiras con el cuchillo.

Engrasamos los moldes con mantequilla o con spray desmoldante.
Empezamos a enrollar las tiras de hojaldre, de forma que cada vuelta monte un poco sobre la última.
Pincelamos el hojaldre con el huevo batido, depositamos sobre la bandeja y horneamos durante 15 o 20 minutos a 200º, que queden dorados.

Dejamos enfriar  para poder manipularlos y desmoldamos con cuidado.Una vez fríos rellenamos con la crema, espolvoreamos con azúcar glas y servimos.