Siempre dejamos las cosas para el último momento, aunque sabemos que no es lo correcto por qué corremos el riesgo de no llegar a tiempo con nuestros compromisos, ya que pueden suceder imprevistos.
Y esto fue lo que me sucedió a mi el mes de abril con el reto «Directas al grano«, veía el día 11 lejos y pensaba que todavía me quedaba tiempo para editar la foto y redactar la entrada, pero una intoxicación alimentaria me jugo una mala pasada, dejándome fuera de combate durante 1 semana y viéndome obligada a no poder cumplir con mis compromisos y tuvimos que cancelar el reto de abril.

Pero ya estamos aquí de nuevo y esta vez con una propuesta dulce. Os invito a visitar las recetas de mis compañeras Beatriz, Carmen, Yolanda y Paula.

 

 

Mi propuesta de este mes son unas croquetas de arroz con leche rebozadas con pan cracker Santa Rita. La receta la vi en el libro 101 arroces del mundo de Thermomix de Vorwerk.

 

 

Ingredientes
para 12 unidades
90 gr de arroz bomba
20 gr de maicena
1 palo pequeño de canela
la piel de 1/2 limón (sólo la parte amarilla)
400 gr de leche
70 gr de azúcar
1 pellizco de sal
para rebozar
1 o 2 huevos batidos
pan cracker o pan rallado
aceite de oliva virgen suave para freír
para espolvorear
3 cucharadas de azúcar
1/2 cucharadita de canela

 

Preparación con Thermomix

Ponemos en el vaso el arroz, la maicena, la canela, la piel del limón, la leche y el pellizco de sal, programamos 30 minutos, temperatura 90º, giro a la izquierda, velocidad 1.
Añadimos el azúcar y programamos 5 minutos, temperatura 90º, giro a la izquierda, velocidad 1.
Vertemos el contenido en una fuente, retiramos la piel del limón y el palo de canela, tapamos con film transparente tocando la crema de arroz para evitar que se haga costra y cuando este frío guardamos en el frigorífico. Mejor toda la noche para que tomen cuerpo, sino un mínimo de 3 horas.
Formamos croquetas con la ayuda de dos cucharas o bolas, (yo he utilizado la cuchara de helados como medidor y luego he divido las porciones en dos). Las pasamos por huevo y luego por el pan rallado seleccionado.
Freímos las croquetas en un cazo pequeño y fondo con aceite de oliva virgen suave caliente, mejor que quede toda la croqueta cubierta de aceite, de esta forma se hace por todos los lados igual y no tenemos que manipularla. No es necesario tenerlas mucho tiempo en el fuego, sólo se ha de dorar ligeramente. Escurrimos sobre un papel absorbente de cocina.
Mientras en un bol pequeño mezclamos el azúcar y la canela, rebozamos las croquetas y servimos.
Nota: se pueden congelar una vez rebozadas, luego sacarlas 30 minutos antes y freírlas.