Uno de los momentos que más me gustan del día son los desayunos. Los días de cada día por que puedo disponer de mi tiempo libre y disfrutar del silencio que se ha creado en casa después de las prisas…  y los fines de semana por que sabes que no tienes ninguna prisa en hacer las cosas y disfrutas de la familia.
Hoy para desayunar os traigo unas madeleines, son del blog de Flor de canela, ella los preparo con frambuesas y un glaseado, pero yo quise aprovechar unos arándanos congelados que tenía y no hice el glaseado para adaptarlo al gusto de mi familia.
Estas madeleines, son para Memòries d’una cuinera que este mes nos ha propuesto elaborar magdalenas
Ingredientes
para 12 madeleines
60 gr de azúcar glas
60 gr de harina
40 gr de mantequilla
2 huevos
1/4 de cucharita de bicarbonato sódico
3 cucharadas de arándanos congelados
1 cucharita de extracto de vainilla o azúcar de vainilla
una pizca de sal
Preparación
Precalentar el horno a 170º.
Engrasar ligeramente el molde de las madeleines.
Poner los arándanos en una bolsa y con la ayuda de un rodillo trocear ligeramente, dando golpes suaves.
Derretir la mantequilla en un cazo. Dejar enfriar ligeramente.
En un bol batir los huevos junto con el azúcar y la esencia de vainilla.
En otro bol mezclar la harina y el bicarbonato.
Añadir la mantequilla  en el bol de los huevos y mezclar. Incorporamos la mezcla de harina y mezclamos hasta que quede la harina integrada.
Agregar los arándanos y mezclar con la ayuda de una espátula.
Llenar con la ayuda de una cuchara el molde de las madeleines y hornear durante 12 o 14 minutos a 170º.