El Galet tiene forma de caracola y podemos encontrarla de varios tamaños. En Cataluña es muy conocida por ser un ingrediente imprescindible durante las fiestas navideñas, en muchos hogares se cocina la tradicional sopa de galet y se utiliza los más grandes.
Debido a su gran tamaño es una pasta que nos permite también rellenarla con carne picada, crema de quesos, verduritas, setas, pero hoy vamos a rellenarla con espinacas.
Esta receta la vi en el blog de Miquel pero yo la he adaptado a los ingredientes que tenía en casa.



Ingredientes

para 4 personas
2 cucharadas de pan cracker Santa Rita
1/2 vaso de leche
400 gr de espinacas crudas
100 gr de queso philadelphia
50 gr de queso roquefort troceado
un puñado de piñones
1/2 cebolla
parmesano recién rallado para gratinar
Para la bechamel
20 gr de mantequilla
1/2 cebolla muy picada
1 cucharada sopera de harina
250 gr de leche
sal
pimienta recién molida

 

Nota: calcular 7 u 8 galets por persona, pero poner más en la olla , ya que se rompen algunos durante la cocción.

Preparación

Ponemos abundante agua salada a hervir en una olla grande para que tengan espacio, hervimos la pasta el tiempo que nos indique el paquete.
Tostamos los piñones en una sartén y los reservamos.
Cortamos 1/2 cebolla en brunoise y la ponemos a pochar en una sartén con un poquito de aceite de oliva virgen, cuando esté tierna y transparente vamos añadiendo las espinacas poco a poco para que vayan perdiendo el volumen.
Añadimos los quesos y mezclamos para que vayan mezclándose.

En el vaso donde tenemos la leche añadimos las 2 cucharadas de pan rayado cracker, mezclamos y lo incorporamos en la sartén donde tenemos las espinacas, añadimos los piñones y cocemos todo el conjunto unos minutos. Reservamos.
En una sartén ponemos la otra media cebolla a pochar con la mantequilla, cuando esté dorada y tierna añadimos la harina y tostamos unos minutos.
Vamos añadiendo la leche poco a poco y removiendo constantemente para que no queden grumos. Salpimentamos a gusto y terminamos la cocción, hasta que espese, no nos debe quedar muy espesa.
Rellenamos los galets con la ayuda de una cucharita o ponemos el relleno en una manga pastelera.
Ponemos un poco de bechamel en el fondo de los platos donde vamos a servir los galets y que sean aptos para el horno, repartimos los galets y rallamos el parmesano.
Gratinamos unos minutos al gusto y servimos.