El chili es uno de los platos que más controversia tienen. Su origen no esta muy claro, se cree que es originario de San Antonio, Texas, un plato cocinado por gente de origen mexicano para americanos, la fusión TEX MEX, pero lo que si es seguro es que a los mexicanos nacidos en territorio azteca no les gusta este plato tejano.
Las recetas de chili de carne hay muchísimas versiones, en mi blog podéis encontrar esta, pero ahora también están las versiones vegetarianas, como la de hoy.


Ingredientes

para 4 personas
2 zanahorias
4 dientes de ajo
700 gr de passata Mutti
1 cebolla
2 chiles o al gusto, tener en cuenta que este plato tiene que picar
1/2 cucharadita de pimentón picante
1/2 cucharadita de comino en polvo
600 gr de frijoles ya cocidos
cilantro
 4 tacitas de café de arroz
tortillas de maíz (opcional)
lima (opcional)

 


Preparación

Primero preparamos el arroz como tengáis costumbre de hacerlo en casa o indique el envase. Una vez cocido reservamos, no debe contener líquido.

Lavamos los frijoles para eliminar el jugo de conservación de la lata, dejamos escurrir.

Pelamos las zanahorias y las rallamos.

Pelamos y picamos finamente la cebolla y los dientes de ajo.

Abrimos los chiles, extraemos las semillas y cortamos finamente, (lavar bien las manos después de su manipulación).

En una sartén ponemos un poco de aceite de oliva virgen, añadimos la cebolla, junto con el ajo y sofreímos unos minutos.

Una vez esté tierna y transparente añadimos el chile picadito, el pimentón picante y el comino en polvo, removemos bien.

Vertemos la passata, dejamos cocer unos 5 minutos y agregamos los frijoles ya escurridos.

Mezclamos bien y dejamos cocer 10 minutos.

Repartimos el chili sobre una cama de arroz, espolvoreamos con cilantro al gusto y unas gotas de lima y servimos acompañado de tortillas de maíz.